

Miguel de la Bastida es un pintor desconocido que vive a la sombra de sus propios fantasmas. Enfrentado a una vida sin rumbo y marcado por la ausencia de Lucía, la mujer que alguna vez amó profundamente, se sumerge en un proceso de creación artística cargado de obsesión y melancolía. Su obra, titulada Athros, se convierte en la única brújula capaz de guiarlo a través del olvido, en una suerte de ritual estético que busca sanar una herida imposible.
En el corazón de la novela se despliega un universo bohemio, donde artistas y creadores vagan entre cafés, callejones húmedos y memorias deshilachadas. En ese mundo, la inteligencia se convierte en espíritu y el arte en lenguaje cifrado. A través de escenas cargadas de simbolismo, la historia nos conduce por un laberinto de introspección, donde cada pincelada, cada nota de jazz, parece tocar un rincón inexplorado del alma.
Athros, el muelle y la Rapsodia en Azul se construye como una mitología contemporánea del amor perdido y la herrumbre del tiempo. En su entramado narrativo conviven lo alegórico y lo filosófico, invitando al lector a descifrar claves ocultas que remiten tanto a la fragilidad de la memoria como a la eternidad de los símbolos. La presencia de la música —particularmente la evocación de la “Rhapsody in Blue”— actúa como hilo conductor entre la nostalgia y la belleza.
Es una novela que desafía la literalidad para transformarse en experiencia sensorial. Llena de intertextualidad y significados superpuestos, la obra no solo busca contar una historia, sino construir un universo que dialogue con la pintura, la literatura y la música. En ese cruce de caminos, el lector encuentra un espacio para reflexionar sobre el arte, la identidad y el poder de la evocación estética como puente hacia lo perdido.